“Mi hija me mandó un mensaje: ‘Amá, eres tú la del video’. Yo andaba en la calle con una amiga, y cuando lo vi le dije: ‘¡esa soy yo!’. Fue impactante. Era la evidencia que siempre quise tener, porque mucha gente no me creía que había cantado con él.”
Ashley Rodríguez / La Voz de Michoacán
Morelia, Michoacán. - En 1986 una adolescente de 16 años, estudiante de preparatoria y fan incondicional de Juan Gabriel, vivió una experiencia que marcaría su vida para siempre: cantar junto al “Divo de Juárez” durante un concierto multitudinario. Casi cuatro décadas después, aquel instante que ella creía perdido entre la memoria y un par de fotografías volvió a cobrar vida al ser incluido en el documental “Juan Gabriel: Debo, puedo y quiero”, producido por Netflix, lo que convirtió su historia en un fenómeno viral en redes sociales.
El fragmento de apenas unos segundos muestra a una joven con lágrimas en los ojos interpretando a todo pulmón “Yo no sé qué me pasó” mientras el ídolo mexicano la mira, la señala, le canta desde el escenario y le pide a una persona de su equipo que la grabe. Su entrega y emoción conmovieron profundamente a los espectadores. Miles de usuarios comenzaron a comentar la publicación de Netflix con preguntas como “¿quién será esta muchacha?” o “qué historia habrá detrás de tanto sentimiento?”.
En cuestión de horas el video sumó miles de reproducciones y comentarios, y se volvió tema de conversación en TikTok, Facebook y X (antes Twitter), donde muchos pedían encontrar a la joven que protagonizaba aquel momento.
Ante la ola de curiosidad, La Voz de Michoacán se dio a la tarea de buscarla. Tras una investigación y el contacto con su hija Karolyna, se logró entrevistar a Alicia González, la mujer que 39 años después conserva con orgullo la memoria viva de aquel día.
Una adolescente que tejió su sueño con pulseras
En 1986 Alicia González estudiaba la preparatoria y pertenecía al club de fans "Arriba Juárez". Juan Gabriel se presentaría en la Plaza de Toros Calafia, en Mexicali, Baja California; para adquirir un boleto Alicia ideó una forma creativa de reunir el dinero necesario.
“Yo tenía 16 años y quería estar hasta adelante pero no tenía dinero, mi papá no me iba a dar, así que empecé a hacer pulseritas y las vendía en la prepa. Pasaba noches enteras tejiendo, una tras otra, hasta que junté lo suficiente para comprar mi entrada”, contó.
Junto a sus compañeras del club llegó desde tempranas horas para alcanzar un buen lugar.
“Nos vimos bien temprano para hacer fila, creo que desde las 11 o 12 del día. Esperamos muchas horas, pero valió la pena. Estábamos muy cerca del escenario y cuando abrieron las puertas corrimos. Queríamos estar lo más cerca posible de él”.
El ambiente del concierto, dijo, era completamente distinto a los eventos actuales.
“Todo el público se comportaba a la altura. No había riñas ni empujones. Todos íbamos a ver a un gran artista, y sabíamos que teníamos que comportarnos con respeto”, recuerdó.
“Jamás pensé que me cantaría a mí”
Entre el bullicio del público, la joven llamó la atención del cantante, quien la miró fijamente y comenzó a cantar para ella.
“Yo sí quería cantar con él pero jamás pensé que se fuera a dar. Cuando vi que el camarógrafo empezó a grabar, sentí que algo podía pasar. En el video se nota que estoy temblando, llorando. No podía creerlo. Era la emoción más grande de mi vida”, dijo entre risas.
El tema que interpretaron juntos fue “Yo no sé qué me pasó”. En redes sociales, los usuarios especularon que la joven atravesaba una situación amorosa, dada la intensidad con que cantaba. Sin embargo, la protagonista aclaró el verdadero motivo.
“Yo estaba enamorada y le estaba cantando al que era mi amor: Juan Gabriel; por eso se nota tanto sentimiento. Nadie me hizo nada, nadie me dijo nada. Simplemente estaba viviendo un momento único, cantando con todo mi corazón.”
Asegura que aquella presentación fue tan mágica que incluso pensó en saltar al escenario, aunque la prudencia la contuvo.
“Sí se me vino a la mente brincar para ir a abrazarlo, pero dije ‘No. Me van a sacar y me pierdo el concierto’. Tuve que comportarme a la altura. Chiquilla, pero con respeto”, recordó.
Una historia dormida durante 39 años
Pasaron casi cuatro décadas sin que Alicia volviera a ver las imágenes de ese día, solo conservaba algunas fotografías tomadas con una cámara de rollo de 110 mm, las cuales aún busca entre sus pertenencias.
“No las he tirado, están muy bien guardadas. Espero encontrarlas pronto”.
Todo cambió a finales de octubre de 2025, cuando su hija la reconoció en el documental estrenado por Netflix.
“Mi hija me mandó un mensaje: ‘Amá, eres tú la del video’. Yo andaba en la calle con una amiga, y cuando lo vi le dije: ‘¡esa soy yo!’. Fue impactante. Era la evidencia que siempre quise tener, porque mucha gente no me creía que había cantado con él.”
A partir de ese momento, comenzó a recibir mensajes y etiquetas de amigos, excompañeras y desconocidos.
“Me etiquetaban, me escribían, me decían ‘te encontramos’. Hasta me salieron hijos nuevos. Muchos pusieron que debía actuar en la serie o que querían saber quién era yo. Fue muy bonito, aunque abrumador.”
La fan número uno del “Divo de Juárez”
Desde los ocho años Alicia escuchaba la música de Juan Gabriel y Rocío Dúrcal. Su admiración por el cantautor era tal que soñaba con ser su corista.
“Yo quería ser corista, dejar la escuela e irme con él. Para mí Juan Gabriel fue mi amor, mi inspiración. Cuando me cantó, sentí que el mundo se detenía. Fue un momento que no se repite.”
Aunque asistió a otros conciertos del artista en palenques años después, confiesa que ninguno tuvo la misma magia.
“El ambiente ya no era igual. Ese primer concierto fue diferente, más puro. Todo el público estaba emocionado, respetuoso. Era otro tiempo.”
Hoy afirma que volver a ver ese video la conmovió profundamente.
“Cuando me reconocí, lloré. Era como volver a tener 16 años. Me vinieron todos los recuerdos, todas las emociones. Pasé el día entero llorando y riendo. Fue un regalo del destino”, relató.
"39 años después tengo la evidencia"
Actualmente Alicia trabaja como maestra y vive una vida tranquila, sin embargo; en los últimos días su nombre ha recorrido las redes sociales. Su historia representa la conexión única entre un artista y su público.
“¡Por fin tengo mi evidencia! Esa es mi prueba de que sí canté con Juan Gabriel. Le doy gracias a Netflix y al documental por haberme devuelto ese momento. Es una bendición.”
Su hija, quien la ayudó a reencontrarse con su pasado, también comparte el orgullo.
“Mi hija está muy emocionada, me dice que me estoy haciendo viral. Para mí lo importante es que ahora el mundo puede ver lo que viví con mi ídolo.”
Alicia asegura que seguirá buscando las fotografías de aquella noche, pues espera compartirlas como testimonio de un recuerdo imborrable.
“No puedo creer que después de tantos años la vida me haya devuelto esto. Dios tenía planeado que este fuera el momento.”
"Ahora sé que formo parte de su historia"
La cuenta oficial de Netflix publicó el video con el texto: “Yo viendo el documental Juan Gabriel: Debo, puedo y quiero”, sin imaginar la ola de nostalgia que despertaría entre los seguidores del intérprete.
Miles de comentarios pedían encontrar a la mujer. Algunos escribieron: “A eso iba uno a los conciertos de Juan Gabriel, a cantar sus canciones con sentimiento y a disfrutarlos”, “Me dieron ganas de cantar como ella, con el sentimiento a flor de piel”, “Encuéntrenla porfis, que nos relate esa escena y lo que sentía”, "Qué envidia le tengo a esta chica, el Divo vio su euforia y admiración", "Qué emoción que tu artista favorito se detenga a verte y establecer esta conexión".
Hoy, gracias a su hija y a la investigación de La Voz de Michoacán, la protagonista tiene nombre, historia y una nueva oportunidad para contar su verdad.
“Yo solo soy una maestra que amó a Juan Gabriel desde niña, pero ahora sé que formo parte de su historia. Eso para mí vale más que todo.”