Realizaron este acto para denunciar “el doble discurso del presidente francés” respecto de Moscú y la guerra en Ucrania.
Este lunes, activistas de la organización ambientalista Greenpeace robaron la estatua de cera del presidente francés, Emmanuel Macron del museo Grévin de París para después colocarla en frente de la embajada de Rusia como protesta.
Los hechos ocurrieron horas antes, cuando dos mujeres y un hombre ingresaron al museo haciéndose pasar por turistas. Ya estando dentro, se cambiaron de ropa para parecer empleados del museo. Posteriormente, lograron sustraer la estatua del presidente francés por la salida de emergencia mientras ocultaban el objeto bajo una manta.
Al ponerla frente a la embajada, los activistas pusieron pancartas diciendo “Ucrania se quema, el negocio continúa” junto a la estatua, esto con el fin de difundir el mensaje del impacto ambiental y ético de mantener relaciones comerciales con un país en conflicto bélico.
“Esta mañana, tomamos prestada la estatua de cera de Emmanuel Macron del Museo Grévin. La sacamos, la sacamos del museo, la llevamos con nosotros y la exhibimos simbólicamente frente a la Embajada de Rusia para denunciar la doble moral del gobierno francés y del presidente (Macron) con respecto a la guerra en Ucrania”, expresó Jean-François Julliard, director general de Greenpeace Francia.
Greenpeace es una organización ambientalista internacional fundada en 1971 en Canadá, y es conocida por sus acciones directas para llamar la atención sobre problemas ambientales.
El grupo ha culpado al gobierno francés de financiar a Rusia en la guerra con Ucrania al ser el mayor importador de gas natural licuado, fertilizantes químicos y uranio producido en el país durante el año 2024.
Fuente: Clarín
