- Alfredo Rampirez Bedolla, rompiendo tabúes…
Y, con dejos de haiga sido como haiga sido, la fuerza política que tiene el actual Gobierno de Michoacán, presidido por el morenista Alfredo Ramírez Bedolla, le ha permitido romper tabúes, una situación impensable antes de su arribo a tal cargo público.
Tabúes ligados con temas que van desde la inseguridad y la violencia hasta con el crimen organizado, si, unos más que otros, directa e indirectamente, como lo son las corridas de toros, los palenques y en ello la pelea de gallos, así como los narcorridos.
El gobernante, sin querer queriendo, asimiló el concepto filosófico de francés Michel Foucault, un especialista sobre las dinámicas del poder, sobre todo para entender que precisamente el poder no solo se posee, sino que se ejerce; eso es lo que viene haciendo, a zancadas.
Esa fuerza política del mandatario michoacano, que le permite el control prácticamente absoluto le da pauta para realizar una simbiosis, por lo pronto en los hechos entre dos de los tres poderes, el Ejecutivo y el Legislativo, imponiéndose para romper dichos tabúes.
Él, aprendió del lopezobradorismo, a dar manotazos legales, a obligar, en nombre de la 4T, a los congresistas locales, morenistas, verde ecologistas y petistas, a fulminar esos tres tabúes citados que ni los priístas ni los perredistas se atrevieron a tocarlos siquiera con el pétalo de una rosa.